-Imagen aphostol-
Es
la ola en la rompiente
quien
se duele,
quien
grita y se disuelve
en
sal y espuma.
El
canto y el grito
y
la espuma
traen
memorias de los mares.
(Secretos
en caracolas,
viajes
galopando en hipocampos).
La
resaca arrastra
un
mundo enredado en algas
mientras
deseas un cielo despejado.
En
la rompiente
salpica
el agua salada.
En
la orilla
te
rebelas ante la bruma.
-Verónica
Calvo-
46 comentarios:
Bonito poema. Soy de mar y siempre me atrajo más el mar revuelto que el mar en calma. Trae más "aire". Bicos
Sidrina: a mí también. Aunque de interior, viví muchos años en la costa atlántica. Me encantaba pasear por la playa cuando había borrasca. Añoro el océano.
Bicos.
Desde la orilla ves la vida y "te rebelas ante la bruma"
Un abrazo.
Rafael: qué sensación y qué ganas de gritar, ¿verdad?
Abrazo.
Estoy deseando de que llegue el momento de encontrarme con esa bruma, y luchar contra ella, para encontrar la calma de las olas, ya queda menos.
Me ha encantado Verónica.
Feliz jueves. Un beso
Carmen: ojalá quede menos, pero por si no teníamos bastante, ahora la eterna vergüenza del Sahara. El mundo nunca fue un mar en calma y la bruma se hace densa y autoritaria.
Disfruta, amiga, a pesar de tanto Tanto.
Besos.
Un placer leerte.
Ángel: agradecida por tu tiempo en leer y comentar :)
Saludos.
Qué poemazo!!!
El mar de aquí es más soso.
Apenas da para inspirar un par de versos medio desmayados.
Besos.
Toro Salvaje: muchas gracias, generoso :)
Pues yo creo que te inspira muy bien. Siempre que me llevas a tu playa disfruto mucho de los versos.
El Mediterráneo sí es tranquilo, pero está lleno de cantos y gritos. Y yo te he oído cantar y gritar en él.
Bss.
Aplausos Verito 👏👏👏 un poema que es pura energía , las ganas el tumbó y las resacas marinas son vida en plenitud
Besitos 😽
Elisa: muchas gracias 🤗
Todo se me ha vuelto mar furioso hoy.
Besos.
Cuánto personificas a la ola rompiente, capaz del grito, del sollozo que es la forma del mar quejarse. Un abrazo. Carlos
Carlos: muchas gracias por tu aporte; valioso :)
Abrazo.
Importante blog, Verónica, tan bien diseñado además, hasta con tus lecturas uno se siente identificado y con la "mirada" con que ilustrás un trabajo que vengo perdiéndome hace tiempo, constato, según voy leyendo aquí y allá entre lo que tenés publicado... De modo que te sigo de aquí en más como un verdadero hallazgo.
Un gran abrazo.
Bienvenido, Carlos: agradecida y honrada por tus palabras y porque estés.
Ya me habló lunaroja de ti y estoy feliz de leerte. Eres un gran poeta.
Al menos Instagram nos presentó oficialmente :)
Otro gran abrazo.
Poema bonito e inspirador, gracias!
Besos
Espe: gracias, siempre a ti :)
Besos.
El mar, la mar, y una poeta que la rasga desde dentro, al estilo austeriano de crear laberintos con sus versos.
Un beso enorme, Vero.
Pitt: siempre cercano. Gracias.
Otro beso, mi querido amigo.
aLa ola en rompiente se duele y grita, Verónica...El mar y sus olas saben mejor que nadie de luchas, traiciones y guerras y se queja,vaya que si se queja. El mar es un animal herido, nos escupe su sal, su furia y su rugido...
Mi felicitación por un poema, que personaliza la voz del mar para gritar que ya está bien, es hora de reflexionar y tomar valores, humanizarnos.
Mi abrazo entrañable y feliz finde, Verónica.
Reflexivo poema a veces el dolor es tan fuerte que ni gritar podemos. Te mando un beso
Bellos e intensos versos dedicados al mar, al mar que también yo amo, admiro.
Saludos, amiga.
Precioso mar, que nos acompaña en esos gritos.
Un abrazo.
Querida María Jesús: una vez más, muchas gracias por el acertado análisis del poema. No se entiende que como especie en lo alto de la pirámide seamos tan ignorantes y destructores. Cada vez hay más conciencia, sí, pero quienes deben tomar partido, cuando se sientan a tomar café y copas en esas reuniones, si deciden actuar, lo hacen para años vista.
Y sí: valores. Pero ya ves, ni valores ni filosofía, no sea que no nos dejemos manipular.
Abrazo, amiga, buen finde.
J.P.: cierto. Pero incluso un grito silenciado o mudo se oye.
Besos.
Nocturno Náufrago: creo que todos estamos unidos en el mismo sentir profundo, silencioso y reflexivo, ante el mar, el cielo nocturno y el fuego.
Saludos :)
Rocío: el mar hipnótico que nos lleva y nos trae.
Abrazo.
Tan inspirador el mar...
Qué pronto podamos sentir el cielo despejado y el mundo se desenrede pronto, Verónica.
Hace tiempo que no voy a la orilla del mar.
Besos
Maite: ojalá, pero el horizonte sigue como un telón oscuro. La guerra que ha desatado Putin ha hecho olvidar que seguimos en una pandemia (que pronto los políticos darán por terminada, así, porque ellos, Dioses, lo dicen, que de hecho ya nos encaminan a ello con bombardeo de palabras muy escogidas). Hay otras guerras, pero como no afectan a Europa y se matan a machetazos, da igual. Y lo del Sahara, que ha sido una gran vergüenza de olvido y abandono y ahora, una traición vergonzosa.
También hace mucho que no voy al mar. Mi entorno está también complicado.
Disfrutemos, amiga.
Besos.
Han de ser los ecos de este convulsionado mundo. Hay rebelión en ese oleaje, una fuerza imposible de frenar o calmar por más que uno desee. Precioso poema mi Vero, te dejo un abrazote linda.
Lyliam: exacto. Así es. El oleaje no solo está en el mar embrabecido. Uno puede hacer hasta cierto punto.
Gracias por el aporte :)
Otro abrazo bien fuerte, mi Lyli.
Si hay algo que me guste es el mar y toda la literatura que surja de este o de esta que para algunos es femenino. De lo que para mí es el horroroso verano sólo me quedaría con el mar y lo de poder abrazarlo sin caer en la hipotermia.
Así que estos versos tuyos que practicamente saben a sal, me traen un motivo en el que recrearme un buen rato. Un motivo y una motivación. Tú si que tienes un mar de talento. Un abrazo
Unknown: agradecida por tu generosidad.
Tampoco me gusta el verano y me pasa igual: se salva por poder estar el mar, o si no puedo, en la montaña aunque sea un rato.
Abrazo.
He recordado mi tierra mientras te leia, es lo que tiene el mar, nos agita y nos conmueve. Lo de caracolas que traen secretos es fantastico. Un placer. Feliz savado.
cuanto cuento, castelo: las caracolas siempre guardan secretos :)
El mar siempre nos fascina y es como dices.Añoro mi playa, sentarme a llenarme de sal y aire y escucharle/me.
Buen finde.
Ese estallido de la ola es nuestra breve existencia contra la roca de la vida y saltamos en espuma, sal y grito.
precioso poemar.
bss
De barro y luz: también :)
Gracias por el aporte.
Me alegra que te haya gustado. Llevamos la sal del mar dentro y somos olas de la vida.
Besos, Luis.
Un precioso homenaje a las olas del mar, rico en detalles, lleno de sabiduría.
Besos.
Amapola: qué bien que te llegue así :)
Besos.
Me has llevado por esa orilla, he escuchado las olas y me he relajado al oler la mar. Un delicioso paseo que en la naturaleza, todo es mucho más hermoso.
Besicos muchos.
Nani: y a mi me has llevado al mar con tu comentario. Gracias :)
Besos.
Revelarse es cada vez más necesario. Bonito poema.
Xan Do Río: y tanto. Tenemos unas tragaderas que rayan en lo patológico.
Me alegra que te haya gustado.
Saludos.
Toda tormenta pasa... aunque tarde en pasar.
Espero que ese cielo claro esté iluminando tu día.
Besitos.
Laura: sí, todo acaba pasando. Es así.
Mi cielo está gris, pero gracias.
Besos.
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