Sollozos que acaban en risas.
Risas que empiezan en el alma.
Alma reflejada en los ojos.
Ojos que brillan de esperanza.
Esperanza, lo último que se pierde.
Pierde quien no sabe perder.
Perder al intentar ganar.
Ganar la merecida paz.
-Paz, siempre buscada,
añorada y perseguida,
como una cadena
que me ata a tí,
como una prolongación de tu esencia-.
Esencia es vapor de espíritu.
Espíritu vuela alto en el corazón.
Corazón... no quiere ataduras.
Ataduras que encadenan.
Palabras encadenadas
son burdas palabras...
-Fue publicado en este blog en marzo de
2009-