11 de noviembre de 2021

Cruce de caminos

                                         -Imagen Diane Varner-

Salí del viejo camino,
tantas veces transitado,
dejando risas,
incertidumbres,
miedos y futuros.
Atrás,
lo que me hizo y que es, (ahora), ajeno,
 
—Demasiado peso;
                          demasiada vida—.
 
Cruce de caminos;
lugar de fragilidad
donde estamos expuestos
a la humanidad que nos habita.
 
A mi diestra,
baldosas amarillas,
conducen a la casa
de tejas rojas por sombrero,
olor a sopa y leña,
luces suaves y anodinas.
Sé que es de donde vengo;
de donde huyo y no lo quiero.
 
A mi izquierda,
entre polvo y umbría,
un camino; sinuoso,
alzada pendiente
y grandes rocas,
adentran en el bosque.
 
Elijo este camino,
sabiendo que la soledad
es compañera;
sabiendo que ya no es reto.
 
Mi alma se eleva,
tiembla como hoja
moribunda de noviembre.
Siento la llamada
y hacia ella me encamino.
 
En el corazón del bosque, mi nido.
              A esta profundidad me entrego.
 
Al caer la noche,
aullaré con la manada,
Luna será testigo,
mientras me desvisto,
de la escarcha.
Beberé arroyos,
seré brisa que mece
atalayas en los pinos.
 
Del bosque soy.
Sombra y viento.
Animal y mineral.
Canción ancestral
al cobijo de la cueva.
 
En el bosque
                   hay un solo latido.
 
-Verónica Calvo-
 
(Junio 2019)

De fondo sonaba Far from any road




31 comentarios:

Verónica Calvo dijo...

A mi Deli, Elisa, Pilar y Pedro, los Cuentistas, en recuerdo de aquella tarde en un cuartito acogedor y silencioso, donde escribimos cada uno, una poesía.

Rafael dijo...

Precioso poema en su conjunto con esa huella latente del bosque y del alma...
Un abrazo.

Verónica Calvo dijo...

Rafael: muchas gracias por tus palabras.
Cada día añoro más respirar en la espesura del bosque.

Abrazo.

Carmen Silza dijo...

Del bosque brota todo lo que necesitamos, hasta ese silencio tan necesario. Precioso poema Verónica.
Feliz jueves. Un beso

De barro y luz dijo...

¡Qué maravilla! Fuera del camino, en la espesura del bosque, a la izquierda, huyendo del mundanal ruido, mecida por la brisa lunar y los aullidos lejanos... ¡me apunto!

Bss

Verónica Calvo dijo...

Carmen: estar en contacto con la naturaleza se me hace necesario. En los bosques siempre he sentido el latido de lo ancestral y mágico.

Feliz jueves para ti también.
Besos, amiga.

Verónica Calvo dijo...

De barro y luz: nada como salirse de la norma y lo establecido.
Aullar en lo salvaje y auténtico; recobrar el pulso ancestral y despeinarse en esa brisa.
Pues claro que te apuntas; no podía ser de otra manera ;)

Besos, Luis.

TORO SALVAJE dijo...

No sé qué decir.
Este poema es de fina porcelana.
Es tan íntimo que no quiero decir nada... y sin embargo lo estoy diciendo.
El poema merece toda mi admiración.
Eres grande.

Besos.

STARLIGHT dijo...

Que precioso mi querida Vero, me hiciste navegar por ese bosque, saludos cordiales desde mi querida Guatemala

Verónica Calvo dijo...

Toro Salvaje: muchas gracias, generoso :)
Ojalá...

Bss.

Verónica Calvo dijo...

Starlight: qué bueno entonces. Espero lo hayas disfrutado :)
Sigo sin poder entrar a ninguno de tus blogs :(

Abrazo.

A.S. dijo...

Precioso tu poema Verónica! Me encantó!
Tierra y el cielo, bosques y campos, lagos y ríos, la montaña y el mar, son excelentes maestros y nos enseñan a algunos de nosotros más de lo que jamás podríamos aprender de los libros.

Te dejo un abrazo!

Verónica Calvo dijo...

Albino: qué bien que te haya gustado :)
La naturaleza habla y por lo que dices, sabes escucharla.
Sonrío cómplice.

Abrazo.

Rocío G. Tizón dijo...

Yo también hubiera elegido el bosque.
Un abrazo, Verónica.

Verónica Calvo dijo...

Rocío: es donde pasan cosas interesantes. En la zona de confort como que no.

Abrazo.

lunaroja dijo...

Este maravilloso poema tiene toda la mística de lo ancestral,de los elementos,del convertirte en parte de ese todo que es el universo,que es la tierra que nos acoge.
Nos llevas de tu mano por esos senderos donde el perfume,el rocío, los caminos que se cruzan nos van guiando.
Pura intuición , dejarte llevar por donde los versos han querido que escribieras. Estado puro de gracia.
Precioso!
Beso enorme.

Verónica Calvo dijo...

lunaroja: muchas gracias por tus palabras.
Salirse de lo establecido y volver al latido ancestral. Elegir ese camino donde todo es Ser.
Tal vez esa intuición...
Sonrío.

Beso grande, A.

LA CASA ENCENDIDA dijo...

Qué poema más hermoso y sentido, Verónica. Sentimientos que rebozan, llenos de fuerza.
Besicos muchos.

Verónica Calvo dijo...

Nani: me alegra que te haya gustado. Este poema es especial para mí. Está lleno de buenos recuerdos.

Más besos van para ti.

Noelplebeyo dijo...

lo cierto que en los bosques la intimidad se hace presente en cada hoja

incluidas las escritas

besos

Verónica Calvo dijo...

Profe: por eso el poema elige el camino que se adentra en el bosque.

Besos.

inma dijo...

Es un poema maravillosamente bien escrito.Aunque yo nunca me decantaría por un bosque, vivo al lado de uno y estoy deseando mudarme.

besos

Verónica Calvo dijo...

Inma: muchas gracias :)
Ya ves, siempre queremos lo opuesto. Yo no puedo vivir sin ir a la naturaleza. Ni cuando viví en la costa estaba saciada de ella. Ojalá se nos ajusten los deseos y necesidades. Sonrío.

Besos.

Mª Jesús Muñoz dijo...

Verónica, después de leer un par de veces tu poema. Siento que es una hermosa alegoría de la vida. Los caminos son las etapas de la infancia, de la juventud, de la madurez...Vamos cruzando por todos ellos directamente al encuentro de nosotros mismos, al "bosque misterioso del alma"...Y lo hacemos en soledad, conscientes de la grandeza e infinitud de su propio universo, amiga.
Mi felicitación y mi abrazo entrañable por tu profundidad y talento literario. Feliz finde, Verónica.

Verónica Calvo dijo...

Querida María Jesús: muchas gracias, una vez más.
Tu análisis e interpretación complemetan con profundidad el poema.
En él está ese boque interno, símbolo y metáfora de una decisión cuando la vida nos pone en una encrucijada. El poema es simbólico y lo has "captado". No diré más, pues no soy de explicar y no hace falta. Sonrío.
Gracias por llegar a dónde yo no :)

Buen finde.
Abrazo bien fuerte.

Sergio dijo...

Me identifico con la elección del bosque y la soledad. Pero también del huir de la certeza y del dónde vienes y elegir mejor el hacia dónde vas. Te ha sentado bien ese rato con tus amigos y amigas cuentistas. Un abrazo
P.D. Ya dirás qué tal esa japonesa que te estás leyendo. Parece de Impedimenta, editorial independiente a la que le tengo cierta afición.

Verónica Calvo dijo...

Sergio: nada como adentrarse en la llamada del instinto. Lo que ya no es, porque ya no eres, mejor atrás y seguir hacia delante. Vamos a la misma.
Fue una tarde muy provechosa. Escribinos sobre estas decisiones en la metáfora del cruce de caminos.
Sí, de Impedimenta.Me gustan las editoriales independientes; se lo curran mucho y suelen ofrecer muy buena literatura.
Me estoy bebiendo el libro. Como eres muy buen lector, te lo recomiendo. Sabrás degustar y apreciar su estilo. Lo que no se dice, sin acotar ni explicar, todo lo que hace la excelente literatura.
Si te animas, me cuentas :)

Abrazo.

Jorge M dijo...

Genial poema amiga Verónica, deseo te encuentres bien , te mando mis mejores deseos y mucho cariño

Verónica Calvo dijo...

Jorge: muchas gracias.
También te deseo todo lo mejor. Tienes un gran corazón.

Abrazo grande.

Carlos Augusto Pereyra Martínez dijo...

Claro que alguna vez sentimos en el cruce de caminos, el llamado de lo que queremos ser, y emprendemos sin miedo el sendero. Carlos

Verónica Calvo dijo...

Carlos; al menos con seguridad o fluyendo en el instinto :)

Abrazo.