30 de agosto de 2015

Se pierden las palabras



Se pierden las palabras
ante el canto de la mar.
Miradas perdidas
en el horizonte.
Suspiros a contra brisa.
La espuma teje encajes,
como velos de blancas nupcias,
en este cuerpo entregado
a tus caricias.

Y se pierden todas las palabras,
diluidas en tu sal.
Mar turquesa, pequeñas olas.
En tu vaivén sueño
caracolas y sirenas.
Y me siento parte
de tu fuerza y de tu aroma.
Soy todo y nada cuando me acoges,
cuando me acunas y sosiegas.

Pierdo las palabras.
Innecesarias son
ante tu belleza.
Ante tu inmensidad


-Verónica Calvo-

-Imagen tomada de la red-

21 comentarios:

Verónica Calvo dijo...

Les leo en estos días.
Gracias por los comentarios.

Joaquín Galán dijo...

El mar,la mar,que decía Alberti. Siempre tan apropiado para hacernos pensar en versos sobre el amor,algo que tiene tanta fuerza como él.
Me encantó el poema Verónica.Sí,sobran las palabras cuando se vive con plenitud la inmensidad del acto de amar.

Un fuerte abrazo

Rafael dijo...

Seguro que no se pierden, si acaso se duermen...
Un abrazo.

lichazul dijo...

así es Verónica
se pierden no solo palabras sino huellas y hasta miradas

abrazos y buena jornada

TORO SALVAJE dijo...

El mar.
Nuestra patria verdadera.

Besos.

Sergio dijo...

Como siempre hay una imagen que me gusta especialmente o destaco. Son esos encajes de la espuma. Un hermoso tejido de agua hilado en verso. Saludos

María dijo...

El mar inmenso azul cristalino donde las palabras se ahogan para ser latido.

Un beso enorme.

Mª Jesús Muñoz dijo...

Verónica, ante el mar las palabras se vuelven gaviotas y alzan el vuelo para tocar la inmensidad...Una preciosidad para sentirlo y no olvidarlo.
Mi felicitación y mi abrazo de luz, amiga.
M.Jesús

Unknown dijo...

El Hombre no es gran cosa junto a las grandes aves y las fieras. Con todo, preferiría ser esa bestia que está allá abajo en las tinieblas del mar...

Heminway.

Amapola Azzul dijo...

Belleza en su estado puro.
Besos.

una chica de ojos marrones dijo...

una preciosidad...
besotes!!

Verónica Calvo dijo...

De Patricia Hernández por email:

Se quedan cortas las palabras en la vida para describir ciertos sentimientos y emociones.
Este es el caso ante la inmensidad del océano. Uno se pierde ante su grandeza.
Grandeza también tu poema al haber puesto en palabras ese recorrido sin principio y sin final.
Gracias, una vez más por la belleza de tus palabras.

Rosa dijo...

Qué belleza.
Y la estética para presentarlo es deliciosa. Qué suavidad y dulzura. Suave azul.
Me encantó.

Un beso, querida Verónica.

Gadi dijo...

Escucho las olas del mar rompiendo en tus versos.

José Valle Valdés dijo...

Pienso que logras muy bellas imágenes, amiga, en este amoroso poema. De mucho gusto.

Abrazo

Tatiana Aguilera dijo...

Frente al océano, ¡qué pequeños somos!. La palabra se enmudece y el sentimiento se engrandece. Frente a las olas y su cadencia enigmática, la palabra asume que algunas veces callando se dice todo.
Abrazos Verónica. Muy bello.

J.R.Infante dijo...

Ya se ve que sientes especial predilección por el mar, por la mar. Suele dejar huella su contacto. Tus versos son tan nítidos que hasta transmiten la brisa marina.- Besos, Vero.

LA ZARZAMORA dijo...

Hasta la fecha, no conocí amante más fiel, leal y del que una siempre sale satisfecha.
;)
Mare Nostrum, eterno de tempestad y de dichas.

Besos, preciosa.

Julieta dijo...

Bonitos versos para el mar...
Deliciosa imagen...
Un abrazo

AdolfO ReltiH dijo...

GUAUUUUU...!

tecla dijo...

No pierdas las palabras, Vero. Ellas sostienen nuestra vida.
Un beso.