26 de octubre de 2019

Un canto al alba

-Imagen tomada de la red-

Es mi cuerpo,
quien canta,
en honor a este alba.
Me despojo de luceros,
espejismos y espejos.

Me desnudo
en el viento de lo eterno,
me esparzo sobre campos de cenizas.

La plenitud de saberme
l i b r e.
El momento que perdura
más allá de lo humano.

Es mi cuerpo el que canta.
Es el infinito que me abarca.


-Verónica Calvo-

20 de octubre de 2019

Ya te olvidaron

-Imagen Leonor Fini-

Ya te olvidaron.
Fuiste tiempo,
letra y sangre.
Aplauso,
corona de laurel
deshecha y quemada.

Ya te olvidaron.
Fragancia de hoguera
donde ardes.
Viento que te barre, ceniza.

Ya te olvidaron.
Otoño sobre otoño,
ocres y silencio
donde (re)nacer(te).

Libre.
El olvido, te crece.


-Verónica Calvo-

(A Bany)

14 de octubre de 2019

Era octubre



Era octubre.
Nos abríamos paso
entre la multitud;
íbamos al frío
del hombre común,
desde nuestro silencio.
¿Quién es cobijo en la ciudad?
¿Por qué van ciegos?
Recogíamos (nuestros)
sueños rotos, pisoteados
y sucios.
¿Quién fue el primero en matarlos?
¿Por qué lo hacen?
Nos quedamos con la ausencia
y el silencio. Invisibles e ignorados.

Calles atestadas.
Rostros y sopores.

Era octubre.
No había hojas en el suelo.
Nosotros, esquivábamos a la gente.
Desde una esquina cualquiera,
habitamos el infierno
—hasta hacerlo nuestro—
y seguimos, entre empujones,
avanzando hacia el ocaso.


-Verónica Calvo-

7 de octubre de 2019

La noche trae calma

Donde el día abraza a la noche,
fina línea del horizonte,
mi espíritu cimbrea.
Coro de estrellas blancas,
sinfonía placentera,
me uno al canto de ellas.

De este velo azabache,
desprendido del cielo,
recojo el misterio.
Ardo y me rehago,
en esta sutil evocación,
donde la paz abarca
el contenido de este cuerpo,
cansado del día saturado
de obstáculos y palabras.

Donde la noche,
me abraza y despoja
de tanto tanto,
siento que soy lo que Yo Soy,
presencia muda amplificada.

Mis palabras, abandonadas.
Luchas vencidas, otras, ganadas.
Del horizonte perdido,
en la noche, hay calma.

-Verónica Calvo-

22 de septiembre de 2019

Regresar

-Imagen tomada de DeviantArt -

Regresar es siempre
volver al lugar que haces tuyo,
y sentirlo lejano,
                       ajeno,
                              extraño.
Miras las paredes,
los libros (estos son fieles),
y los recuerdos en alguna balda
de la estantería, ahora, anodina.
Lo tirarías todo
(menos los libros, ellos no mienten),
y harías de tus paredes un grafiti
con olas y gaviotas;
con helechos y musgo del verde bosque.

No haces nada,
porque sabes que volverá la pátina.
La rutina del vivir día a día,
la inercia del tiempo muerto,
entre pagar facturas y sobrevivir domingos.

Te acercas a la estantería
y elijes un libro
(los libros siempre te auxilian)
mientras esperas reconocer,
todo esto que es tan tuyo como ajeno.

-Verónica Calvo-