-Imagen Anne Julie Aubry- |
Ella lee bajo la
luna
viejos poemas de
Withman.
Se sabe hoja de
hierba
abrazada al
hielo de los meses
y sueña fundirse
en la escarcha.
Es Mujer de
Luna,
saturada de
noche,
perfumada con amapolas
y libre -digamos,
salvaje-,
como el mistral
que azota.
Acoge entre sus
filos
estertores prolongados.
Calla, se
apacigua y duerme
enredada en un
verso imaginario.
Reina del ocaso.
Viva imagen del
misterio.
Salvaje -es
decir, libre-,
recorre solitaria
la bóveda celeste;
la gran cúpula
que la protege.
-Verónica Calvo-