-Imagen
tomada de la red-
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Como
recién llegado al mundo,
a la estampida de raíces a la que llamamos vida,
aprenderás de nuevo el orden de los astros,
la laboriosa ciencia de ser en otros
otra vez solo, tú,
polizón de los días que aún te aguardan.
No esperes el asilo de los pájaros.
No aguardes el consuelo de la nieve.
Aquí, arrojado, aprendiz del oficio
de intemperie, comprenderás, tarde o temprano,
que no hay albergue en el corazón de un náufrago,
si no es para las olas.
-De Si descubres un incendio-
11 comentarios:
Muchas gracias, amiga, por compartirnos este estupendo poema.
Abrazos
El poema es magnífico.
Gracias por compartirlo.
Me ha gustado mucho.
Besos.
Gracias por compartir estos versos.
Un abrazo.
Impresionante este poema, gracias por traerlo!
Un besazo!
Unas bellas letras, un abrazo con cariño :*
Bellísimo!
Me encanta la poesía, fue muy grato descubrir tu espacio, cuando gustes te espero por el mio.
Cariños.
Qué bello. Gracias.
Esa imagen también la tengo guardada.
Un beso muy grande, mi querida Verónica.
Un poema precioso para la reflexión. Gracias por tu buen gusto.
Estupendo poema.
Gracias, Verónica. Besos
Hermoso poema has elegido Verónica, muy bello. Tiene estilo, ritmo, magia, una delicia leerlo. Gracias por acercarnos a Conejero.
Un gran abrazo para ti.
Lo desconocía, gracias por el aporte.
Buscaré más.
Sigamos al abordaje de la Poesía, mi querida Corsaria.
Besos.
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