17 de febrero de 2017

Declaro y aviso

-Imagen: Brooke Shaden-

En silencio camino entre la niebla
palpando como ciega mi destino.
Mensaje a los cobardes: no me inclino.
Prefiero vivir sola en la tiniebla.

Transito sendas incómodas a veces
sin perder de vista el claro horizonte,
pues la vida le enseña a quien afronte
sus miserias, qué de verdad pareces.

Siempre sola bailando en el abismo.
Soy casi tan libre como la brisa.
Jamás me miento con el espejismo.

Porque nadie me hará perder la sonrisa
ya que yo no nací para el servilismo.
De tu esquema me declaro, insumisa.


-Verónica Calvo-

13 de febrero de 2017

Extraño poema

-Imagen Igor Lihovidov-

Un eco nuboso retumba a lo lejos
y sacude sus sueños que huelen a vida.
Despierta entre espuma de sal
y sabe que la emoción no era fingida,
                                                     ni definida,
                                                                    ni sometida.

Hay muchas razones y una sola vía.
Poco queda de lo etéreo pues se diluye
en el centro de la melancolía.

Y ahora
se viste de viento poniente
y se adorna con el polen de los días.

-Verónica Calvo-

9 de febrero de 2017

Caminar y divagar


-Imagen: Brooke Shaden-
Dormir.
Reconstruir.
Pasear,
incluso divagar por las aceras.
Serenar.
Recomponer.
Restablecer
esa nada que fecunda la idea.

Y seguir caminando
o divagando mientras el aire se lo lleva.
Dejar que todo suceda,
como un sublime poema, perdido, en el duermevela.

-Verónica Calvo-

1 de febrero de 2017

Anne Sexton: La noche estrellada


La ciudad existe solo
allí donde un árbol de hojas negras crece
como una mujer ahogada hacia el cielo ardiente.
La ciudad está en silencio. La noche hierve en once estrellas.
¡Oh, noche estrellada, noche estrellada! Es así
como yo quiero morir.

Ella se mueve. Todo está vivo,
incluso la luna se hincha en sus hierros naranja
para pujar niños, como un dios, desde su ojo.
La vieja serpiente oculta se traga las estrellas.
¡Oh, noche estrellada, noche estrellada! Así es
como yo quiero morir:

dentro de esa bestia precipitada de la noche,
sorbida por el gran dragón, separarme
de mi vida, sin bandera,
sin vientre,
sin grito.


-De Todos mis seres queridos-